Los faros han sido guardianes silenciosos de costas traicioneras, testigos de tormentas que han azotado pueblos enteros con vientos huracanados y olas colosales. Estos pueblos costeros, con sus torres centenarias, cuentan historias de supervivencia y naufragios a través de arquitectura erosionada y leyendas locales.
Estos destinos, seleccionados por su drama histórico y vistas dramáticas, combinan melancolía con belleza, donde el mar susurra relatos de coraje. A continuación, un ranking de los cinco más cautivadores, con detalles sobre su esencia, accesibilidad y costos aproximados para una visita de dos días.
1. Cape Hatteras, Carolina del Norte, EE.UU.
Cape Hatteras, en las Outer Banks, es un pueblo donde el faro de 1870, pintado a rayas negras y blancas, narra la historia de tormentas como la de 1899 que destruyó 200 casas. Esta torre de 64 metros, la más alta de ladrillo en EE.UU., ha salvado barcos de los «Gravesyards of the Atlantic».
Con 1 millón de visitantes estimados, explora playas con naufragios visibles y el Museo de los Outer Banks ($10 USD). Accesible desde Raleigh ($100 USD en coche), hospedaje en cottages desde $120 USD por noche. Es un relato americano de furia oceánica.
2. Stonington Harbor, Connecticut, EE.UU.
Stonington Harbor, en Connecticut, cuenta con el faro de 1840, el primero convertido en museo en 1927, que sobrevivió al huracán de 1938 que arrasó 100 millas de costa. Sus 18 metros de hierro negro narran vientos de 160 km/h y olas de 10 metros.
Con 50,000 visitantes estimados, tours gratuitos incluyen vistas a la bahía. El tren desde Nueva York cuesta $30 USD, con B&B desde $150 USD por noche. Es un faro neoyorquino que susurra tormentas atlánticas.
3. Portland Head Light, Maine, EE.UU.
Portland Head Light, en Cape Elizabeth, Maine, es el faro más fotografiado de EE.UU., fundado en 1791 y testigo del huracán de 2007 que destruyó muelles cercanos. Su torre blanca de 24 metros narra olas de 15 metros y naufragios de barcos balleneros.
Con 500,000 visitantes estimados, entradas gratuitas con vistas a Fort Williams Park. Accesible desde Portland ($10 USD en bus), hospedaje en inns desde $180 USD por noche. Es un guardián de tormentas nororientales.
4. Point Bolivar Light, Texas, EE.UU.
Point Bolivar Light, en Galveston, Texas, es una torre de hierro negro de 1872 que sobrevivió al huracán de 1900, el peor de EE.UU., que mató 8,000 personas. Sus 35 metros narran vientos de 200 km/h y marejadas que inundaron la isla.
Con 200,000 visitantes estimados, escalada cuesta $5 USD. El bus desde Houston cuesta $20 USD, con motels desde $100 USD por noche. Es un testigo texano de furia huracanada.
5. Chatham Lighthouse, Massachusetts, EE.UU.
Chatham Lighthouse, en Cape Cod, Massachusetts, de 1808, narra tormentas como la de 1991 que erosionó 100 metros de costa. Su torre roja y blanca de 39 metros guarda historias de rescates en aguas heladas.
Con 300,000 visitantes estimados, tours gratuitos incluyen el museo. Accesible desde Boston ($50 USD en tren), hospedaje en B&B desde $200 USD por noche. Es un faro de tormentas atlánticas.
Junior Marte